13 de abril de 2008

Guillermo Cañas

"Entro a una cancha y trato de alcanzar lo que quiero..."

El 25 de noviembre de 1977 en Tapiales, partido de
La Matanza, nace un tenista descomunal: Guillermo Willy Cañas. Con tan sólo 7 años comienza a empuñar la raqueta de tenis para luego convertirse en top ten del ranking mundial. A este joven deportista profesional el destino lo puso contra la pared en reiteradas oportunidades pero él, siempre optimista, logró y logra salir adelante con su mejor cualidad: la perseverancia.

Desde muy chico está acostumbrado a luchar para conseguir lo que quiere. Su familia fue su escuela principal, sus padres le inculcaron la cultura del esfuerzo y la dignidad a partir de su nacimiento: lo acunaron en una sólida cuna construida con educación. Guillermo Cañas juega al tenis con la mima filosofía que se maneja en la vida, siempre que ingresa en una cancha lo hace con el único objetivo de intentar alcanzar lo que quiere.



Puso primera y arrancó, ni siquiera los semáforos en rojos lo detuvieron en su camino. Tras sufrir distintas lesiones en su rodilla, su muñeca y su mano, que le impidieron jugar durante períodos de uno, cuatro y hasta ocho meses, siguió con la misma entereza de siempre. Su rendimiento y su condición se incrementaban a cada instante para en 2005 ser bajado de un hondazo por la ATP (Asociación de Tenistas Profesionales).


En el torneo ATP de Acapulco (México) se realizó un control
antidoping en donde le encontraron rastros de diuréticos. Este hito en la vida de Guillermo Cañas lo inhabilitó para jugar por aproximadamente quince meses (era de dos años pero logró apelar y reducir la sanción). Alrededor de esta desafortunada noticia acerca del tenista argentino empezaron a correr distintos juicios de valor, mentiras y chismerios de poca monta. Mientras muchos se llenaban la boca hablando de dicha injusticia; él seguía entrenando y perfeccionándose para regresar al polvo de ladrillo y causar nuevamente estragos en el ranking mundial.

Nueve meses es el tiempo que tardó en ascender desde el puesto 514 al 22 del ranking. Roger Federer (número uno) fue a quién le ganó cortándole la racha de 41 victorias consecutivas demostrando sus habilidades de juego. Quince son los días que trascurrieron desde el primer hasta el segundo triunfo contra el suizo e incontables son las veces que Guillermo Cañas nos demostró lo cierto de la frase: “persevera y triunfarás”…

30 de marzo de 2008

Atahualpa Yupanqui


“Cuando ensillo mi caballo
me largo por las arenas
y en la mitad del camino
ya me he olvidao de las penas”

Se conoce con éste seudónimo a Héctor Roberto Chavero Aramburu, un reconocido y excelente cantautor de folclore que desde su comienzo debió sobreponerse a las dificultades que el destino tenía preparadas para él. Su nacimiento fue en Pergamino, en el año 1908, pero al poco tiempo el trabajo de su padre como Jefe de Tráfico del ferrocarril requirió su traslado a un pequeño pueblo llamado Agustín Roca, ubicado a 11 Km. de Junín.

Allí vivió con sus padres en una casa modesta próxima a la estación de tren. Su infancia se acuño junto a la vida rural, la responsabilidad y la lucha cotidiana que el campo requiere. Desde chico compartía las tardes al lado a los campesinos y copleros que recitaban y hacían música con sus violas. Incentivado por su padre, a quien también le gustaban los atardeceres de coplas, comenzó a tomar clases de guitarra en Junín con la ayuda de su maestro Bautista Almirón.

La situación económica en la que se encontraban tanto la familia Almirón como la suya era bastante limitada por lo cual habían acordado hacer una suerte de intercambio con la hija de su maestro para que ella pase unos días en A. Roca mientras él se quedaba en Junín estudiando; de ésta forma mantenían el equilibrio de los gastos. Asimismo, el pequeño Atahualpa se sentía inmensamente rico en comparación a la familia de su profesor por lo menos en cuanto a horizontes, ya que desde su casa se podía apreciar el ocaso del sol en la lejanía mientras que en Junín las casas vecinas no permitían dicha infinidad visual.

Para 1923 las cosas cambiaron drásticamente: su padre se suicido por razones económicas habiéndose gastado el dinero del ferrocarril en las apuestas. Con tan sólo 16 años de edad empezó a forjar su propio destino junto a la música, haciendo de la guitarra su única compañera. Permaneció en el pueblo por unos años más hasta que decidió tomar unas mudas de ropa, la viola, unos pocos pesos que tenía y emprender un viaje al norte sin fecha de regreso establecida.

Salir de su pueblo que lo acunó durante varios años lo ayudó en su posterior camino de éxito y reconocimiento. No es preciso hacer mención de sus canciones, ni sus libros, ni sus viajes, ni sus amistades de adulto ya que esa es una parte de la historia que todos conocemos…